1.20.2009

Casa

Anoché regresé a mi casa, mi pequeño estudio de este lado de la bahía.
No estaba triste en el aeropuerto, aunque mi padre sí.
Me hace feliz estar acá otra vez.
Este mes en Tijuana tuvo cosas buenas, claro, divertidas, chistosas, tristes y decepcionantes;
fue un buen mes, un mes necesario.
Es sólo que el estar acá me causa algo, me aleja de los dramas y de las cosas con las cuales ya
no quiero lidiar, nunca.

Llego y tengo una multa de 50 dólares por no haber movido mi carro en más de 72 horas...
Yo no sabía que tal reglamento existía.
Y luego lo veo a él, ya que tiene mis llaves, y siento como las cosas no están tan mal.
Me vé, sonríe, sonreimos, deja su trabajo a un lado y me abraza.
Me abraza y lo abrazo.
Y se invita solo a la mesa que comparto con mi sobrina y se hace conocer.

Ya estoy en casa.
Ya estoy en calma.
Ya quiero un lunes de aquellos otra vez...

No comments: